A mediados de la década de 1970, existía el colegio de la inmaculada concepción, estaba ubicado en una de las esquinas de la famosa placita de Molongo, y enfrente de dicho colegio estaba ubicada la vivienda del Dr Nova , medico homeópata, masón grado 33 . En un salón en la esquina de dicha vivienda, estaba el templo masónico, y trabajaba o sesionaba periódicamente la logia “ LUZ DEL CARMEN 21 No 60., de la Villa Meritoria.
El grupo juvenil cofradía Rosca Azul, en plena adolescencia, con promedios de edades de sus integrantes de 12 años, hacia sus primeros pininos sexuales, por dos de las vías, la primera masturbación en términos científicos, y paja en términos castizos, y que entre otras cosa no es paja, es verdad ,y la segunda comer burras a lo costeño, y en términos cachacos, relaciones sexuales extramatrimoniales con asnos. Era usual, que el grupo Rosca Azul realizara estas actividades burrales en las fincas cercanas aledañas al pueblo, especialmente en la finca del ganadero y comerciante Baltazar Torres, padre de unos de los integrantes del grupo, y que entre otras cosas, este cofrado, era un experto en esta materia, ya que llamaba a las burras por nombres, como a una que le llamaba Serafina, y las amarraba con gran facilidad y destreza.
En las vacaciones de mitad de año 1972, por razones celestiales, unos integrantes del grupo Rosca Azul, hicieron amistad, con un Sr de apellido Mendoza, le decían el pata de ñame , porque cuando pateaba los balones de futbol, los hacia bramar, decían en el pueblo que era brujo, porque espantaba las lluvias los días festivos como el 16 de julio día de la patrona virgen del Carmen . Este Sr era el celador del colegio de la inmaculada, y le concedió un permiso especial a los integrantes de la Rosca Azul para introducir las burras y pollinas en el patio del colegio, para que allí se realizaran las relaciones sexuales de una manera cómoda. Las pollinas, le llaman a las burras más jóvenes, que comparándolas con el sexo femenino, son las jóvenes entre 14 a 20 años de edad. Todas las tardes, los integrantes del grupo, cortaban hierva en la parcela del toto Alarcon y se las llevaban a sus amores, hasta le tenían nombres, recuerdo una burra de muy buen fenotipo que le llamábamos la India Catalina , por su cuerpo guitarreado, y un caminar como reina en pasarela.
El 16 de julio del año de 1972, día de la virgen del Carmen, en las horas de la mañana varios integrantes de la Rosca Azul , procedían a entrar al patio del colegio, para hacer cuchucho con las burras, y de repente sienten que enfrente de la calle caían asientos o taburetes con unas espadas cruzadas en la parte trasera de los mismos, y al verificar lo que estaba sucediendo, caen en la cuenta, que Raulito Nova , hijo del Dr Nova estaba procediendo a sacar y tirar hacia afuera de su casa los asientos que hacían parte del templo masónico, que allí trabajaba. Al preguntarle a Raulito, porque está haciendo semejante sacrilegio, estando recién llegado de un tratamiento psiquiátrico en Sibate, manifestó que en el templo, practicaban los masones ritos satánicos, ya que el veía, que los integrantes de la logia se metían una vela por el ano, y pisaban un crucifijo con velas encendidas. Esta ceremonia, era similar al del baile de la pluma, que los cabareteros hacían en el Gabi, el prostíbulo más reconocido de los Montes de Maria, con el propósito de ganarse una relación sexual con la mujer más bonita y voluptuosa del burdel. El juego consistía en que todos los hombres presentes en el burdel, bailaban al ritmo de gaitas, con una pluma en el ano, y al final el que no la dejaba caer, ese se ganaba el premio, que era llevar a cabo la relación sexual con la mujer más bella. Todos los integrantes del grupo procedieron cada uno a llevarse los asientos con sus espadas para sus casas, y algunos vecinos aprovecharon para quedarse con algunos. El baile de la pluma , es posible su nacimiento en un templo masónico.
En la mañana siguiente 17 de julio, día del cumpleaños del cofrado Hugo Rivero Arroyo, en las horas de la tarde, nuevamente el grupo se dispuso a realizar en el colegio las faenas sexuales con las burras, sesión que se había vuelto costumbre. Ese día se agregó al grupo al grupo un niño de aproximadamente 9 años, cuyo nombre era Willy Hernandez QEPD, y que también quería tener relación con alguna de las burras por invitación de algunos de los cofrados. Como Willy , era el más jovencito del grupo y el más pequeño, no alcanzaba a poder tener relaciones, le acomodaron un asiento de los masones, de los que Raulito había sacado del templo masón. Este asiento se lo acomodo Jaime Castillo Romani y Toño Sotelo, quienes eran vecino del barrio y amigos rosquero de infancia. El asiento se lo amarraron a las patas de la murra, cuando estaba Willy intentando el acto sexual, se presentó repentinamente la madre superiora, que acaba de visitar al papa en el estado vaticano, y exclamo Juan Pablo sexto, virgen santísima, esto es el fin del mundo, aquí hay unos demonios. Cuando la monjita exclamo esa frase , la burra salió corriendo llevándose consigo el asiento que le habían amarrado a las patas, y el niño Willy fue arrastrado por la burra pollina por el patio del colegio, causándole laceraciones en la cara, en el pecho, y el pene.
En las vacaciones de diciembre del mismo año, los hermanos Florez, cofrados y burreros también, tenían en su casa un primo de origen paisa pasando vacaciones, sin ninguna experiencia en estos menesteres y lo invitaron a comer burras con los demás integrantes del grupo en las afueras del Carmen, en los predios del aeródromo, donde apastaban estos asnos por cantidades. Los integrantes del grupo, hicieron una fila india para ir de uno en uno a hacer relaciones con las burras, en una zona enmontada para tener la privacidad sexual. El último de la fila, era el paisita, y finalmente procedió a entrar a la zona para hacer la relación sexual. Los demás compañeros, estaban desesperado porque el paisita estaba demorando demasiado, alrededor de unos 20 miniutos , por lo que procedieron ir a buscarlo, pero se encuentran con la sorpresa , que el paisita venia sangrando desde la frente hasta el pecho, y con los dientes reventados, por lo cual, los cofrados le preguntaron qué había pasado, y el entonces contesto , que estaba tratando de acomodar la burra, igual a como se hace el sexo con las mujeres . El paisita, fue llevado de urgencia, al hospital Monte Carmelo, en el perímetro urbano del Carmen de Bolivar, y alli le realizaron las curaciones, perdiendo un ojo, y la dentadura principal.
El 31 de diciembre del mismo año 72, estaba la cofradía Rosca Azul reunida en el famoso gastrobar de los hermanos Florez, departiendo unas aguiluchas bien heladas, y se presentó Alesio Frieri , el papa de Omarsito , y entre mamadera de gallos , comento que había un harén de Burras cerca de la plaza de mercado, a cinco cuadras del gastrobar. En el grupo estaba el sacristán de la época, y comento que el patio del colegio nuestra señora del Carmen, contiguo al patio de la casa de Manuelito Fernandez, y al patio de la casa cural esta apto para departir con burras y pollinas, ya que había árboles frutales, hierva y agua para las futuras novias y esposas. En consenso de nombro una comisión para que recogieran las burras, y las entregara en el sitio al sacristán, gestión que se hizo al pie de la letra.
En las horas de la noche, y al llegar se encontraron con la sorpresa que el cura estaba casi desmallado y le estaba haciendo el sacristán una toma caliente de valeriana, y al preguntarle al sacristán lo sucedido nos explicó que el cura se había adelantado en la sesión y por falta de experiencia comenzó la relación burril, pero con la sotana, y entonces cuando le agarraba el rabo a la burra para que introdujere el pene esta se lo imposibilitaba, y entonces el cura sintió una voz de ultratumba que le dijo la sotana se agarra con los dientes, y esa fue la causa de su infortunio, porque además que no pudo copular con la burra fue despedido de la iglesia por sacrilegio. La Rosca Azul, en los días posteriores, procedió a convivir con sus burras en este lugar, y después con un estudio que se realizó , se concluyó que la voz que el cura escucho era la de Manuelito Fernández Behaine, quien había sido asesinado en el teatro Santafe, y sus restos velados en dicha casa, pero sus nueve noches no se hicieron completas, y por ello esta penando. Dicen que aún se escucha esa voz, clamando misericordia ,y estará se escuchara, hasta que se completen las nueve noches . Las personas mayores de ese sector , como los médicos Barrios, y Bray comentaban que el espíritu de Manuelito divagaba entre el teatro Santafe de su propiedad, y su casa que era vecina de la casa cural. Las nueve noches no terminaron porque el libanes Elias Fernandez Behaine Saher, padre del difunto así lo dispuso 7 noches , debido a los postulados de la religión Maronita que se practica en su tierra natal, y además no se repartió a los deudos y amigos, como es costumbre la tasa de arroz con leche, y el tradicional quibbe, en señal de la hospitalidad libanesa.
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